miércoles, 1 de julio de 2009

1."Correcto Vs. Correcto" (Diana)


Las relaciones de la empresa con la sociedad a nivel supra organizacional. Aquí debe analizarse de qué modo se esta definiendo la relación de la empresa con la comunidad de acuerdo al modelo de Joseph Badaracco (Unidad 6). En el caso de los temas teóricos, debe prepararse un análisis de “los dilemas correcto vs. correcto” del tema investigado.
Como nuestro caso es un tema teórico se analizará los dilemas “correcto vs. correcto”.
Los dilemas “correcto vs. correcto” del modelo de Badaracco, básicamente son “momentos de las verdad” que en el caso de la crisis “Sub-Prime” no se tomaron en cuenta en lo absoluto y ni siquiera se tomó importancia. Por ejemplo, los Bancos o las entidades financieras dejaron de lado este punto y no quisieron evaluar el daño a futuro que causarían por tomar una decisión errada de seguir vendiendo las hipotecas con un alto riesgo crediticio.
Del mismo modo, el grandioso Wall Street, siendo una organización o entidad de mayor prestigio, la cual se suponía que sabría como reconocer los dilemas éticos empresariales y analizar en daño o repercusión que causaría al país o en mayor escala al mundo. Pues no lo hizo y no le importó causar daños colaterales como desequilibrio financiero a las empresas involucradas y a los países, las innumerables deudas financieras en todo en mundo, aumentó la desconfianza de las personas inocentes que en algún momento llegaron a confiar en la rentabilidad de Wall Street y ellas creyeron que iban a recibir ganancias, pero no fue así; y sobre todo causaron un daño en el bienestar social y económico a las empresas involucradas y, también, al resto del mundo que apostaron por invertir en Wall Street.
Todo ello se hubiera evitado si desde un principio se analizaban las repercusiones que afectaban a las personas inversionistas, a las personas inocentes de los Estados Unidos que compraban las hipotecas. Y si Wall Street tomaba la decisión correcta y asumía los compromisos morales, sin dejar de lado el horizonte de los objetivos y si hubiera tomado la decisión correcta de manera ética y transparente. El autor menciona que es difícil encontrar ese momento de la verdad pero no imposible, si uno se lo plantea.
En síntesis, hubo varios “momentos de la verdad”, los cuales algunos bancos, entidades del gobierno de los EEUU y Wall Street, no quisieron sentirse obligados a solucionarlo y ni siquiera le prestaron la debida atención al caso. En contraste, si todo ello, se hubiera hecho de buena fe, sin dañar a terceras personas no estaríamos pasando por una crisis financiera que a muchas empresas ha llevado a la banca rota. De ahora en adelante, esto nos sirve de experiencia y según Badaracco menciona tres funciones o efectos de un “momento de la verdad”, una de ellas es que revelan los valores que cada uno emplea a la circunstancia que afronta, el siguiente es poner en prueba el compromiso de tenemos como persona o institución y debemos de involucrarlo con los valores, de esta manera sabemos que valores nos ayudaran en el futuro; finalmente, es que nos forman, ya que las decisiones que tomemos nos convertirán en personas diferentes y nos ayudará a establecer jerarquía de valores que aplicaremos en nuestro futuro como organización o personas.
Finalmente, se recomienda que antes de tomar cualquier decisión de dilemas éticos de “correcto vs correcto” se debe analizar a los STAKEHOLDERS y no solo pensar en los intereses de uno si no abrir nuestra manera de pensar, para de este modo no causar daños a gran escala a personas inocentes.

2. Balance General (Karla)


Unidades analizadas:
Unidad 1: Introducción a la ética para los Negocios
Unidad 2: El esquema de la ética para los Negocios
Unidad 3: Las teorías éticas normativas para los Negocios
Unidad 4: El manejo de los dilemas éticos empresariales
En el análisis del caso del Origen de la Crisis Subprime, se pudieron identificar varios temas estudiados en el curso, a medida de resumen se mencionaran cuatro unidades relevantes que hay que resaltar en este análisis. La primera de ellas es la Unidad 1: “Introducción a la ética para los Negocios”: Al hacer mención de la crisis financiera es imposible no pensar en las consecuencias trágicas que ha traído consigo…entonces se cuestiona a la gran potencial mundial de Estados Unidos, quien se jacta por temas de crecimiento sostenible, mejor calidad de vida, movimientos verdes empresariales. Sin embrago, ¿Dónde quedaron todas estos discursos en el caso Subprime? Al parecer, sólo es una simple imagen que trata de ocultar los manejos que realmente ocurren en el país que el resto de países quiere alcanzar a ser. ¿Dónde estaba el cuidado de un mundo mejor para las generaciones futuras? Obviamente, el análisis de la situación, si es que la hubo, fue muy cortoplacista, dejando de lado la equidad intergeneracional, la sostenibilidad que deberían mantener y equilibrar las empresas responsables de una potencia como Estados Unidos. Se puede decir, que ninguno de estos agentes tuvo en cuenta ninguno de los tres pilares de la base de la sostenibilidad. Por ejemplo Wall Street, imponente agente no solo en Estados Unidos, sino a nivel internacional, con todos sus manejos fraudulentos afectaron el aspecto económico, causando un desequilibrio financiero a nivel mundial. ¿Esta fue la manera en la que se pretende tener un crecimiento sostenible a largo plazo? Las empresas involucradas en el caso, no es que dejaron de existir, muchas de ellas aún operan y siguen en el mercado como si nada hubiera ocurrido, tentadas, probablemente, a caer una vez más y causar daños medioambientales, económicos y sociales. El mundo es sólo uno, y le pertenece a todos, no a las empresas más poderosas, así que se debe tener más consciencia, más respeto, más prudencia, y más ética, si se quiere ofrecer un desarrollo sostenible, tal como se “proclama”. Se deben hacer mayores esfuerzos para poder cumplir con los pilares de la sostenibilidad, en vez de ser los causantes de todo lo opuesto.
Una vez más, se menciona al gigante de Wall Street y su actitud en el caso, esta conlleva otra unidad estudiada en el curso: “El esquema de la ética para los Negocios”; especialmente el estudio de la responsabilidad social empresarial. Sin lugar a dudas, esta entidad, como las Agencias Calificadoras de riesgos y los bancos obsesionados por la venta de cada vez más hipotecas, dejaron de lado toda la responsabilidad que les correspondía tener a cada uno de ellos, tanto en el aspecto de los negocios y al aspecto moral, ya que dejaron a todos los dueños de las hipotecas, como a los inversores decepcionados, con grandes deudas y algunos hasta en quiebra. En vez de preocuparse por dejar clientes satisfechos, para así poder sembrar confianza en el mundo financiero, tras algunos otros escándalos ya ocurridos por culpa de fraudes y malos manejos en los negocios, sólo se preocuparon por sus propios intereses de lucro, y desequilibraron todo el mercado, especialmente a todos sus stakeholders… ¿Dónde quedaron sus derechos sociales y civiles? ¿Quién, cómo y cuándo volverán a protegerse los derechos de sus ciudadanos? Wall Street y el gobierno estadounidense debió ofrecer una mejor ciudadanía, la cual vele por el respeto y cumplimiento de estos derechos, y preocuparse por no verse envueltos en más escándalos que sólo consiguen la pérdida de la confianza de un mundo de los negocios claro, transparente y honesto, que se preocupe por generar un equilibrio entre los intereses de la empresa, como los intereses de sus stakeholders. Todos estos grandes agentes involucrados simplemente no actuaron con responsabilidad empresarial, entonces si se tiene que tomar de ejemplo al más grande o al más fuerte… ¿Qué clase de futuro nos espera dentro de un mundo empresarial responsable?
Todas las decisiones tomadas por los protagonistas del Caso Subprime, se pueden estudiar brevemente por medio de “las teorías éticas normativas para los Negocios”. Estas decisiones que conllevaron a las consecuencias que todos conocemos y vivimos hasta ahora, se puede decir que fueron tomadas por relativistas éticos, que sólo creyeron en “su propia verdad ética”, como por ejemplo los bancos que incentivaban a las personas insolventes a adquirir hipotecas, tan sólo preocupándose por sus ganancias, y no por sus principales stakeholders, sus clientes. Estos personajes sólo se preocuparon por defender “sus principios morales” y “su abnegación por la rentabilidad de cada agente financiero al que pertenecían”. Sin embargo, esto no es lo peor, ya que toda esta cadena de malos manejos empleados, nos llevan a pensar, que hubieron algunas instituciones involucradas en el caso, tal como Wall Street, que dejaron de lado su actitud de relativista ético, es decir que no hicieron caso ni a su “propia verdad ética”, ya que no hubo ninguna decisión tomada por su parte que pueda ser defendida por su “perspectiva ética”: la creación consiente de paquetes disfrazados para los inversionistas, el reportar la posesión de las hipotecas en subsidiarias de las islas Caimán para que sus estados financieros no mostraran las deudas, la crudeza de ofrecer a grandes inversionistas estas hipotecas, prometiendo rentabilidad.. Todo ello sólo fue vil engaño, tomar ventaja de sus conocimientos financieros para perjudicar a los menos fuertes, simplemente cerraron las puertas de la ética en todas sus decisiones, y lo hicieron de una forma muy consciente y egoísta.
Ahora bien, un representante de Wall Street o un agente dedicado a la venta de hipotecas, puede tratar de justificar algunas de sus acciones, diciendo: “Estaba en medio de un dilema ético”…Según la última unidad que se analizará, es decir la unidad que nos habla del “Manejo de los dilemas éticos empresariales”, se puede hacer frente a esta “justificación” que algún agente involucrado pudo dar. En primer lugar, en todo el desarrollo del caso, hubo una serie de “momentos de la verdad”, los cuales las entidades del gobierno estadounidense, algunas entidades financieras y por su supuesto Wall Street, no quisieron prestarle la debida atención. Esto se debe a la falta de evaluación previa de tomar las decisiones, si hubieran tenido mayor conciencia de todo lo que estaba en juego: la pérdida total de confianza en el mercado bursátil, el desequilibrio financiero de grandes empresas, las pérdidas de inmuebles por gran parte de la población, las grandes deudas, y en general bienestar social y económico no sólo de Estados Unidos, sino de muchos otro países, entre ellos se incluye al nuestro. Si hubieran analizado que los afectados no sólo eran los inversionistas que adquirían estos bonos disfrazados, sino que ellos mismos serían también los afectados; si tan sólo se hubiera tomado la decisión correcta, actuando de manera transparente y ética, es muy probable que no se lamentaran tanto las terribles consecuencias que se han experimentado durante estos años. Los responsables de dar origen a la crisis Subprime, olvidaron que las decisiones que tenían en frente eran de tipo “manos sucias”, y que el futuro no solamente de Wall Street y de las entidades financieras, sino el futuro del país, y países asociados estaba en juego, olvidaron o quisieron olvidar optar por el camino correcto, el de la verdad y cumplimiento de la moral, para tomar el camino más fácil, el cual les hizo pagar con grandes intereses.

3. Conclusiones Finales y Perspectivas Futuras (Ximena)


El caso de las hipotecas “Sub-Prime”, como todos ya saben, es el caso más sonado (económicamente hablando) de los últimos días. Todo el mundo está siendo afectado de una u otra manera por dicha crisis, los temas tocados en este blog lo han expuesto de la manera más clara y entendible. Siendo ya la última parte del mismo, empezaremos a recopilar, con ayuda del balance elaborado, y a dar a conocer opiniones grupales al respecto.
La triple base de la sostenibilidad (económico, tecnológico y social). ¿Cómo enfocamos estos temas con la crisis “Sub-Prime”? Se empezará por explicar en qué consiste la triple base de la sostenibilidad y cómo debe aplicarse en cada organización para que funcione de manera correcta, tomando en cuenta los intereses de la ciudadanía; es decir, cómo cooperan las entidades involucradas en la crisis financiera en el desarrollo de las sociedades y de qué manera contribuyen para darles sostenibilidad a las generaciones futuras, desgraciadamente en la memoria de estas generaciones sólo quedará el granito de arena con el que contribuyó cada empresa para que se genere uno de los más grandes problemas que el mundo sufrió en el panorama económico. Aún cuando se ve solo en el ámbito económico, como ya explicamos en puntos anteriores, no fue así: las personas que tuvieron que regresar a sus países por el desempleo, las mismas que no pudieron mandar dinero a sus familias por la misma causa, los problemas sicológicos que puedan tener algunos; se pueden enumerar un buen numero de consecuencias. Entonces (…) volvemos a cuestionar lo mismo, ¿aplicaron estas organizaciones la triple base de la sostenibilidad?
Aparentemente no lo hicieron.
Todas las grandes compañías están aplicando el término de responsabilidad social dentro de sus actividades diarias, de tal manera que se comprometen, de cierta forma, con la sociedad y buscan la manera de retribuir consumiendo sus productos o servicios. Ahora, las personas están acostumbradas a tomar como modelo a seguir al “más grande” (en todos los aspectos), en el caso de la crisis el “más grande” es Wall Street. Si dicho gigante financiero no tomó en cuenta las consecuencias que generarían los préstamos hipotecarios, tanto en el mercado financiero como en las mismas familias de estas personas, ¿cómo sus seguidores lo harían? La responsabilidad social es un tema que les compete a todos, si solo se toman algunos aspectos dentro de esta se termina por restarle importancia a otros; definitivamente en este caso se perdió el interés en los clientes poniendo por encima de esto las ventas y beneficio de las entidades. Personalmente, dentro de esta crisis, no hubo responsabilidad social.
Por lo general, las personas están acostumbradas a velar por su bien y el de su familia. Al estar las organizaciones conformadas por personas, por naturaleza buscarán su beneficio. Esto puede llegar a sustentar las decisiones que tomaron viéndolo de algún modo. Definitivamente nada justifica el hecho de no haberse trazado bien sus metas tomando como referencia las metas de los inversionistas, clientes, etc. Sin embargo, se puede casi afirmar que no tomaron en cuenta las consecuencias, de tal manera que sólo creyeron en “su propia verdad ética”; se hicieron malas prácticas, éticamente hablando, ya que defendieron su posición y la pusieron sobre los intereses de las personas que sustentaban sus compañías: los clientes.
Si una persona se encuentra, como se dice, “entre la espada y la pared” es lógico que analice todas sus opciones para ver cuál es la mejor solución al problema o por último la más adecuada, donde salgan beneficiados todos. El problema al que se enfrentaron las entidades financieras surgió cuando vieron la oportunidad de negocio en prestarle dinero a personas sin solvencia; pero en realidad no vieron más allá de lo evidente, es decir, se enfocaron solo en lo que sus ojos veían: en el corto plazo. Con esto se puede explicar el hecho de que, definitivamente, ningún alto empresario de estas entidades pudo darse el tiempo en pensar en todas las repercusiones que tendrían las decisiones apresuradas, de la misma manera tampoco supieron ver cuál de todas sus opciones era la mejor dentro de lo que pudieron hacer. Se pudo evitar la crisis sino hubiera sido una carrera por quien ganaba más dinero.
En general, si se hubieran tomado en cuenta a todas las personas que se vieron y se siguen viendo afectadas, todas las quiebras financieras, todas las consecuencias psicológicas, etc., se estaría hablando de un mundo perfecto. Definitivamente, las personas se equivocan; sin embargo hay errores que pueden ser permitidos y otros que se tienen que evitar a toda costa. Por malos manejos financieros, muchas personas que probablemente no hayan estado involucradas están sufriendo, lógicamente también las que estuvieron involucradas. Las malas prácticas en cualquier aspecto de la vida tienen repercusiones, sobre todo cuando se trata de situaciones que incluyen a la ética en la decisión final. Si se pensara en resolver el problema de a poco, aunque sea, una conclusión dada sería que deben analizar todas las opciones y tomar más en cuenta la forma ética de actuar, en vez de pensar en el beneficio propio o por último de la corporación. Si se quiere ser egoísta, que se sea egoísta para la sociedad en general, porque al fin de cuentas es esta la que mantiene en pie a cualquier institución y al mercado en general. Si se vela por el interés de la sociedad se vela por el interés de uno mismo.
Las reglas se las impone cada institución, si se parte de ahí se podrán realizar buenas prácticas éticas. Las personas deben mantenerse comunicadas constantemente con sus superiores, de tal manera que no exista la inhibición al momento de consultar cómo se debe actuar, no solo de abajo para arriba, sino también de arriba para abajo, es decir que un jefe pueda consultar una decisión tan importante como las decisiones que generaron la crisis con sus subalternos. Esta es la mejor manera de obtener información y de evitar errores, ya que mientras más opiniones se tengan más ideas de las que uno se puede sustentar para solucionar cualquier inconveniente.
Para terminar, un video que ofrece ciertas soluciones para la crisis; aparentemente no la solucionará pero si es la manera que las entidades y personas deberían de actuar. http://www.youtube.com/watch?v=7U6v-zUrp2Q

4. Recomendaciones para la ciudadanía corporativa en el tema (Diego)


En este punto, se darán a conocer las recomendaciones del grupo para que puedan servir como herramientas básicas pero notables para el análisis de cómo se puede mejorar el manejo de las actividades de la organizaciones con respecto a este ambiente de crisis económica generada, principalmente, por la hipotecas Sub- Prime.
La responsabilidad de las compañías debe ir más allá de su rol puramente económico, para asumir un rol social. Esta idea nos sirve como apoyo para la primera recomendación, la cual recae en que la ciudadanía corporativa, puede tener muchas definiciones pero básicamente puede ser definida como los compromisos, estrategias y prácticas que una compañía desarrolla para la implantación, evaluación y retroalimentación de su conducta, ética y relaciones corporativas. En lo que respecta a la triple base de la sostenibilidad, se busca un punto de equilibrio que, no solo beneficie a las futuras generaciones que verán retribuidas los esfuerzos de sus antecesores, sino que sean ellos mismos los que promuevan las soluciones inmediatas, que bajo este contexto económico, puedan ser muy útiles para no volver a cometer los mismos errores y así puedan establecer políticas idóneas que todos los entes, que participan en el mercado , puedan asumir y llevar a cabo de manera conjunta y exitosa. En este punto podemos citar lo siguiente:

“Si se quiere seguir manteniendo como responsabilidad social de las actividades financieras el mantenimiento de la confianza (como bien interno a sus actividades específicas), entonces habrá que dotar a la libertad y el poder creciente de que gozan, de un sentido ético. Para lo cual podría ser conveniente establecer unos códigos de conducta en los que se exprese una clara voluntad de autorregulación institucional y profesional” (Conill, 1995: 82)


Una segunda recomendación expone que se debe crear un clima de estabilidad institucional conforme vaya repercutiendo la crisis. Una forma sería mantener una relación armoniosa con todos los agentes, tanto del entorno interno como externo, garantizándoles un manejo responsable, ético y cuyos beneficios sean equilibrados entre todos, ya que asi se llegará a una armonía de todos y un desempeño óptimo de las actividades, así como asegurándole un bienestar a sus familias y a otros miembros de la comunidad. Esto hará posible, sin duda alcanzar, altos grados de rendimiento y productividad durante la vida útil de la organización y/o del sistema. Generar mecanismos de divulgación que promuevan comunicación efectiva. Para lograr que todos hablen el mismo lenguaje y tengan el mismo entusiasmo, es necesaria la comunicación.
Una tercera recomendación es la necesidad de mejorar los modos de operar y los procedimientos independientemente de los manejos de las instituciones financieras con respecto al análisis y evaluación crediticia. Deben tenerse en cuenta los riesgos de crédito y también de liquidez, un factor que se ha subestimado. Es decir, conocer bien al deficitario, estudiar a fondo los productos que se comercializan y limitar las posiciones propias de las entidades crediticias. En este sentido, resulta también clave encontrar nuevos sistemas de remuneración de los altos ejecutivos que no estén tan vinculados a los resultados a corto plazo sino que se enfoquen en principios de largo plazo, ya que la mayoría de los fondos que repercutieron en el origen de la crisis abarca dicho plazo de tiempo. En definitiva, es necesaria una mejora en la gestión de riesgos, en el cumplimiento normativo y en los sistemas de gobierno.

Finalmente, una cuarta recomendación que se da es la de incentivar a todas las fuerzas del mercado, en este caso financiero pero que se pueden aplicar a todos los sectores de la sociedad en general, a promover una cultura organizacional como “un todo”, es decir no buscar el egoísmo que conlleva, de una u otra forma, a la inequidad e injusticia, sino que se llegue a un nivel en que todos los participantes de este conjunto se vean retribuidos de manera equitativa conforme al sacrificio realizado y a la tareas que les fueron encomendadas, ya que esto no solo promoverá el buen ambiente y desarrollo personal sino que también permitirá un mayor crecimiento en el aspecto profesional que hoy en día es necesario en todo individuo para que todos juntos lleguen a alcanzar las metas trazadas como parte de una sola organización.